El otro día me entraron muchas ganas de volver a escuchar Joy Division, y en mis profundos estados anímicos y escuchando las oscuras pero suculentas letras de Ian Curtis, empecé a preguntarme como es que finalmente tomó la desición de acabar con su vida y de paso con la de la banda el 20 de mayo de 1980. Un suicidio no deja de ser, nunca, una salida dramática y exhibicionista y valiente. No todos tenemos la espesura para hacerlo y algunos otros tampoco la intensión, o esas ganitas irrefrenables de colgarse del techo de la cocina, que él debio sentir, no lo sé, justo en el momento justo.
Los textos de la canción que escucho hoy son de mr. Curtis, nada más una muestra de la angustia y desesperación:
So this is permanence, love's shattered pride.
What once was innocence, turned on its side.
A cloud hangs over me, marks every move,
Deep in the memory, of what once was love.
Oh how I realised how I wanted time,
Put into perspective, tried so hard to find,
Just for one moment, thought I'd found my way.
Destiny unfolded, I watched it slip away.
Excessive flashpoints, beyond all reach,
Solitary demands for all I'd like to keep.
Let's take a ride out, see what we can find,
A valueless collection of hopes and past desires.
I never realised the lengths I'd have to go,
All the darkest corners of a sense I didn't know.
Just for one moment, I heard somebody call,
Looked beyond the day in hand, there's nothing there at all.
Now that I've realised how it's all gone wrong,
Gottas find some therapy, this treatment takes too long.
Deep in the heart of where sympathy held sway,
Gotta find my destiny, before it gets too late.
Bueno, luego de esto no queda nada que decir, solo que como muchos escritores y músicos, decidio no vivir más de 25 años. La última canción que tocó en público fue "digital".
enjoy
gracias